top of page

REVIEW: "BARBA: EL MUSICAL DE PERCUSIÓN CORPORAL"

A través de canciones como Baianá y Êh Êh! y también con percusión corporal conocemos este nuevo musical: "Barba", que desde el minimalismo escenográfico, logra que veamos a un gran elenco que desde el primer momento da todo de sí y convierten al escenario de Teatro Espressivo en una celebración a la cultura brasileña.


Barba agotó sus funciones en Nueva York y llega a Costa Rica bajo la dirección de Guy Retallack en formato de workshop, esto es una etapa de desarrollo donde el equipo creativo prueba el material - texto, música y puesta en escena- con el fin de detectar qué funciona y qué necesita antes de llegar a escenarios más grandes como West End o Broadway. En el caso de Barba, esta también, es la primera vez que la obra se realiza en español.

Fotografía: Sergio Saravia
Fotografía: Sergio Saravia

El musical, basado en la autobiografía de Fernando Barba, nos transporta a Brasil donde vemos a Barba desde que es un niño y descubre junto a la ayuda de su abuelo que puede hacer música con la ayuda de su cuerpo. Con el paso del tiempo, vemos cómo Fernando se empieza a apasionar cada vez más en su música, y busca cómo enseñarle a la gente que no necesita la ayuda de instrumentos para hacer música, sino que con su cuerpo y su voz, pueden hacer grandes cosas, de ahí nace el grupo musical Barbatuques.


A partir de ahí, el montaje nos muestra las distintas adversidades que atravesó el grupo, pero también las grandes oportunidades que llegaron con su propuesta. Al mismo tiempo, refleja las consecuencias que Barba tuvo que enfrentar por priorizar su vocación por encima de todo: el diagnóstico de una enfermedad, y la ruptura de su relación amorosa. Una vez que este líder fallece, vemos cómo su legado aún sigue vivo tanto en los miembros de la agrupación como en los seguidores del grupo.

Fotografía: Sergio Saravia
Fotografía: Sergio Saravia

El libreto de Kim Bixler y Carlos Bauzys pasa por los momentos principales tanto de la vida de Fernando como los de Barbatuques, todo desde la perspectiva del mismo. No es solo un orden cronológico de lo que sucedió, sino que también nos lleva hasta los lugares más íntimos de Barba y cómo su agrupación siempre estuvo para apoyarlo; de igual manera con su hermana: una de las personas más importantes en su vida, a pesar de las circunstancias que la rodean, siempre salió adelante gracias al apoyo de su hermano. De esta manera, el texto nos invita a descubrir no solo su trayectoria, sino cómo los lazos familiares también hicieron su legado posible.


Con un score por Carlos Bauzys que va hilando la historia; momentos como You Ready donde llena de picardía el escenario, pero al mismo tiempo, compone los momentos más solemnes del musical como The Window o The Cage (este último podría estar a una altura similar a la de "John Nineteen Forty-One") en los que ha establecido un mood muy específico. Bauzys tiene la habilidad de que con su música, nos lleve en una montaña rusa de emociones en cuestión de segundos, y eso se refleja en Remember When en donde nos hace pasar por la ternura, la risa y la empatía en cuestión de minutos.

Fotografía: Sergio Saravia
Fotografía: Sergio Saravia

El conjunto es un híbrido entre un musical jukebox y uno con composiciones originales, ya que incluye canciones de los Barbatuques y música propia del montaje. Esta mezcla le da su toque especial, porque toma las canciones más importantes del grupo y también, aporta piezas originales que le dan una capa más a la historia de Barba.


Esta producción tiene grandes momentos de ensamble donde todos brillan, como cuando vemos algunas de sus presentaciones, pero los que quedan en el corazón del público son las más íntimas del montaje, en las que vemos los sentimientos de los personajes y así, entenderlos desde otro lugar.

ree

En sus interpretaciones, Barba no se queda atrás y demuestra un trabajo actoral sólido. Los roles principales aparecen tanto en su versión joven como en la adulta, siendo Saúl Vega quien da vida a Barba en su niñez y Samy Araya a Tata en la suya. Juntos forman una dupla muy tierna: en el rostro de Saúl se refleja la emoción de descubrir por primera vez que puede hacer música con su cuerpo y, al mismo tiempo, la fuerza para ayudar a su hermana a enfrentar la discapacidad desde otra mirada. Su personaje incluso tiene apariciones casi omnipresentes dentro de la historia, donde confronta al Barba adulto en los momentos en que los miedos amenazan con dominarlo. Por su parte, Samy aporta una inocencia entrañable, mostrando a Tata como alguien que, pese a sus limitaciones físicas, ve la vida sin fronteras, y que junto a su hermano construye una relación de apoyo constante y profundamente conmovedora.

Fotografía: Sergio Saravia
Fotografía: Sergio Saravia

Rafael Arias brilla como Barba, dominando la percusión corporal con precisión y sensibilidad, mientras muestra el progresivo desgaste del personaje por no priorizar su salud. El momento de la cirugía marca un quiebre impactante: de ser un cuerpo lleno de ritmo pasa a la inmovilidad, reflejando en su ánimo la fragilidad del artista que depende de su propio cuerpo como instrumento. La dirección potencia este arco dramático, y encuentra un contraste en Adriana Víquez como Tata, quien en la adultez invierte los papeles y ahora es ella quien lo sostiene, abordando al personaje con empatía y ternura, y transmitiendo la fuerza de una relación que se transforma sin perder su esencia fraternal.


Una revelación en este musical es Betzabeth Rojas como Dani, aunque ya la conocíamos como ensamble en algunos musicales, que tenga un personaje acá, hace que veamos la gran capacidad actoral que tiene, con una voz poderosa y una fuerza escénica demasiado potente que te eriza la piel en momentos; hace un contraste entre la fuerza y la vulnerabilidad muy hermoso: en Remember When abre su corazón y y logra una de las escenas más emotivas de la obra, donde la vulnerabilidad se convierte en su mayor fortaleza.

Fotografía: Sergio Saravia
Fotografía: Sergio Saravia

Barba tiene un ensamble espectacular dirigido por Rodrigo Varandas que tiene una energía increíble; el musical tiene un elenco tan entregado y dispuesto a dar todo en cada función que contagia al público con su energía y convierte cada número en una celebración. Ese nivel de compromiso colectivo hace que la obra no dependa solo de los protagonistas, sino que brille como un esfuerzo en conjunto donde todos aportan con la misma pasión. El musical cuenta con algunos músicos en algunas canciones, pero la mayoría es creada con el cuerpo y los músicos también se vuelven parte de la percusión corporal, lo que refuerza la esencia del montaje.

Fotografía: Sergio Saravia
Fotografía: Sergio Saravia

Barba tiene una iluminación (Valeria Coghi) que intensifica cada momento de la escena para que quede en la memoria del público. Un momento espectacular es en The Cage donde con su luz convierte la escena en un momento solemne donde se le da la despedida al líder de Barbatuques y realzando la emoción de la escena. Un vestuario (Abril Jenkins) colorido y espectacular que complementa la energía del ensamble y ayuda a definir la personalidad de cada personaje, aportando ritmo y vida a cada número y haciendo que la puesta sea visualmente inolvidable. Y un diseño de sonido (Giancarlo Tassara) envolvente que logra sumergir al público en cada escena, equilibrando la percusión corporal con la música en vivo

Fotografía: Sergio Saravia
Fotografía: Sergio Saravia

En algunos números de ensamble, la intensidad y la energía de la interpretación hacen que la dicción sea menos clara en ciertos momentos, como ocurre en Baianá, donde la letra puede perderse entre la fuerza del elenco. Esto sucede puntualmente y no en todas las canciones, y lejos de restar valor a la puesta, refleja el entusiasmo y la entrega total de los artistas en escena. La pasión con la que se sumergen en cada número logra transmitir emoción de manera que la falta momentánea de claridad no disminuye la potencia ni el impacto del espectáculo.

Fotografía: Sergio Saravia
Fotografía: Sergio Saravia

Barba se presenta como un musical que va más allá del entretenimiento y se convierte en una celebración de la cultura brasileña, la música y los lazos familiares. Desde su minimalismo escenográfico hasta la potencia de su ensamble, cada elemento —dirección, actuación, música, percusión corporal, iluminación, vestuario y sonido— se combina para ofrecer una experiencia intensa y emotiva. La obra nos invita a recorrer la vida de Fernando Barba, descubriendo su pasión por la música, las adversidades que enfrentó y el legado que dejó, mientras apreciamos el compromiso de un elenco que da cada función con absoluta entrega. Barba logra conmovernos, emocionarnos y hacernos vibrar, dejando claro que la fuerza de la creatividad y la perseverancia puede transformar vidas y perdurar en el tiempo.

Fotografía: Sergio Saravia
Fotografía: Sergio Saravia

"Barba: El Musical de Percusión Corporal" se presenta del 11 al 28 de septiembre en Teatro Espressivo. Jueves, viernes y sábados a las 8:00 p.m. y domingos a las 6:00 p.m.

Comentarios


bottom of page